domenica 26 settembre 2010

Liguria
NO DI SOVRINTENDENZA E REGIONE
Campo da Golf dell’Acquasanta

Buone notizie dalla Liguria.


Pubblichiamo dal sito:

http://versose.altervista.org/?p=2274

Gruppo Consiliare Partito della Rifondazione Comunista - Sinistra Europea
Genova 14/09/10
Campo da Golf dell’Acquasanta: No di Sovrintendenza e Regione
Da anni esprimo il mio disaccordo alla costruzione, in località Acquasanta, di un campo da Golf a 27 buche con annesse atrezzature di servizio e strutture ricettivo - residenziali.Non solo per il massiccio uso di pesticidi e prodotti chimici (che si propagano anche ai terreni circostanti col rischio di contaminazione di falde acquifere) ma anche su altre argomentazioni, riprese da due pareri espressi ultimamente da Sovrintendenza per i Beni Architettonici e Paesaggistici della Liguria e dal Settore Valutazione Impatto Ambientale della Regione Liguria.
Le motivazioni che ora sintetizzo mettono una definitiva pietra tombale su tale progetto.
Secondo la Soprintendenza infatti “… per quanto concerne zona boschiva e corsi d’acqua, potrebbe stravolgere il delicato sistema del territorio caratterizzato da un ambiente naturale e agricolo di valore naturalistico elevato con zone a bosco. Si ritiene che l’intervento data l’estensione e la difficoltà di accesso, che porta a ingenti movimenti di terra per il golf, potrebbe comportare oltre a rilevanti modifiche della morfologia del paesaggio anche alterazioni dell’assetto idrogeologico.Pertanto l’intervento nella misura in cui è previsto non risulta compatibile.
La Regione parla di:alcune macro-problematiche di carattere ambientale, tra le quali spicca il contrasto tra le dimensioni dell’intervento (intese sia come consumo di suolo e risorse naturali che come carico insediativo), le difficoltà di accesso all’area e il grado di naturalità del contesto.La disponibilità di acque ad uso irriguo e potabile, inoltre, pur essendo elemento sostanziale per la fattibilità dell’intervento, non appare sufficientemente dimostrata. Conseguentemente, non sono ad oggi escludibili o quantificabili gli impatti sulla risorsa idrica e sugli ecosistemi.Le residenze e la viabilità occupano gran parte delle aree di crinale che, per morfologia, sembrerebbero le più idonee allo sviluppo delle buche. Queste ultime vengono quindi distribuite anche alle periferie dell’area di intervento, comportando ingenti movimenti terra (anche in presenza di amianto) e alterazioni dell’assetto idrogeologico locale che non consentono di escludere impatti ambientali con incidenza sul contesto limitrofo.
Chiedo quindi che la Sindaco e la Giunta si impegnino a cambiare il PUC per impedire tale costruzione, e a studiare nuove forme di valorizzazione dei territori agricoli e di quelli destinati al turismo eco-compatibile
Il CapogruppoAntonio Bruno

giovedì 2 settembre 2010

El humorista George Carlin sobre el golf
"DEPREDACION PARASITARIA"

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=111559

El golf, elogio de la razón burguesa-capitalista de depredación parasitaria
Melanie Belanger
Rebelión
«(...) la realidad surge en el espectáculo, y el espectáculo es real. Esta alienación recíproca es la esencia y el sostén de la sociedad existente (...) el espectáculo no es nada más que el sentido de la práctica total de una formación socio-económica, su empleo del tiempo. (...) constituye el modelo presente de la vida socialmente dominante. Es la afirmación omnipresente de la elección ya hecha en la producción y su consumo corolario (...) En el espectáculo, imagen de la economía reinante, el fin no existe, el desarrollo lo es todo» (Guy Debord, La Sociedad del Espectáculo, 1967)

Ah, el golf... ¡
Si solamente la gente supiese un poco mejor lo que es realmente!
Quizas sea bueno empezar mostrando lo que significa el golf en el propio corazón del Imperio, pero desde una perspectiva política y una mirada profundamente crítica, cómo la que ofrece el irreverente, militante anti-capitalista y anti-imperialista, humorista George Carlin sobre este asunto:
http://www.youtube.com/watch?v=AbSRCjG-VLk.
En este fabuloso monólogo, Carlin demuestra que la superficie ambiental y socialmente perdida en EEUU por causa de esta actividad que el describe como « elitista, de burgueses liberales egocentricos y arrogantes, inútil, destructora y aburrida », corresponde al tamaño de 3 estados de este país (dos veces el Delaware y una vez el Rhode Island, o sea, más de un millión de hectáreas). Menciona que en este espacio y con los recursos que se invierten futilmente en él, se podría acomodar a toda la gente que vive actualmente en las calles de los EEUU...
En términos de literatura general, una muy breve incursión en la web nos permite constatar la amplitud y la fuerza de los movimientos sociales que denuncian el golf, sobre todo por razones socio-ambientales
1.
Sin embargo, los promotores del golf, para no dejar de estar a la moda, dicen: « bueno, de acuerdo, pero... ¡es posible de hacer clubes de golf que sean ''sustentables''! » (sobre todo si ellos ''pagan'' los estudios de impacto ambiental, ¿cierto?...). Claro, esta es la ''onda'' ahora: se disfranza de verde, se tranquilizan las conciencias, y... se sigue haciendo igual. Estamos en ésta era en la cual el llamado ''desarrollo sustentable'' (o sostenible) se ha transformado en un nuevo caballo de batalla del capitalismo. ¡Y que caballo! Hay de todo, y todo ahora es sustentable (pero, ¿que se está sustentando o sosteniendo, exactamente?). No solamente hay ''golfs sustentables'', sino que hay también carros sustentables. Sí, sin broma; los fabricantes de autos y las petroleras transnacionales han adoptado una estrategia publicitaria de marketing « verde », feroz y muy seria. A prueba, una famosa companía japonesa que fabrica vehículos recientemente sacó una propaganda que dice « Haga su parte para la Tierra; consígua la nueva XXX, eco-energética, porque cada gesto cuenta », y los pajaritos cantan, y los árboles -al pasar el auto ''ecológico''- tiemblan con el viento, y la gente en el anuncio se ve taaaaan feliz... Claro, tienen toda la razón de para estarlo: han comprado un carro que no solamente les permite preservar su estilo de vida destructor, sin ningún remordimiento de conciencia ante la alarmante tragedia mundial de los cambios climáticos, sino que además, al hacerlo, ¡estan salvando al planeta! ¿Que lindo, no?
Si señoras y señores: hoy, todo es ''sustentable'', o sostenible. No solamente los golfs, el petróleo y los autos, sino también los microwaves, las barbies, los peluches, y pronto, de repente, saldrán algunos bloomers sustentables. Quizas nos dirán entonces, por allí, que la etiqueta de esta ropita interior es biodegradable, y muchos aplaudirán y saldrán corriendo a comprársela de una vez. Esta vitrina, o ''lavado de cara verde'' (greenwashing) es una fuerza cada día mas acechante y poderosa. ¿Cómo podría no ser así? ¡Es tan lucrativo! Y la gente se traga el cuento: el engaño es enorme. No porque el consumo responsable – a nivel ecológico y social – no tenga validez ninguna. Claro que SI, tiene validez. Lo que se está denunciando aquí, sin embargo, es otra cosa: es la lógica perniciosa que permite al sistema capitalista re-condicionar a la gente para que se queden en la superficie, de forma instrumental y mecánica, y que no reflexionen y menos aún actúen, o poco, sobre las causas profundas – sistémicas y estructurales – del problema. Aquello resultaría radical (como solía decir Jose Martí, sería de « ir a la raíz de las cosas »), crítico, y hasta peligrosamente revolucionario. Pero obviamente, ¿que se puede esperar de unas sociedades ''moldeadas'' desde hace más de un siglo y medio por la cultura hegemónica del capitalismo y la creencia sagrada en el ''progreso'' occidental
2? Por esta razón, creo que debemos tener fe y velar a la vez por que este nefasto fenómeno capitalista no eche raíz en aquellos paises de ''Nuestra América'' que se inscriben ya, felizmente, dentro de procesos socialistas revolucionarios, ¿no?
Vuelvo a los golfs. Por supuesto, existen algunas que otras estrategias para que los golfs sean un poco menos contaminantes y destructivos a nivel estrictamente ecológico
3. Sin embargo, el lobby del golf en los paises del Norte despliega grandes esfuerzos para ''verdecer'' la cara de este pasatiempo. Digo pasatiempo (o hobby), porque al igual que George Carlin, no creo que se le pueda calificar de ''deporte'' a esta aberración de esparcimiento, en la cual alguna gente, prepotente en su mayoría, de la clases sociales altas y muy altas o aspirando (medias) a formar partes de ellas, se pavonean sobre un grama cortica, arregladita y anormalmente perfecta, pegan una y otra vez una pelotita ridícula y la alcanzan con vehículos motorizados, acompañados de sus ''seguidores y servidores'' (los caddies) que les recogen y les lavan el equipo, para luego tomarse ellos una copita en el lujoso Club – privado, de membresía exclusiva y caro, por supuesto – donde aprovechan el momento para hacer ''business''. ¡Tan soberbio, cómo bien lo dice Carlin, es este pasatiempo en términos de espacio necesario para su práctica! Estos inmensos terrenos (que miden cientas de hectáreas cada uno) representan una enorme pérdida de tierras potencialmente cultivables, o de bosques existentes o potenciales, o sencillamente de espacios donde podría habitar mucha gente. Aquello no solamente es increíble, sino que resulta ser también profundamente indecente en estos tiempos de severa crísis socio-ambiental y económica que vivimos en todo el planeta. Pero no es todo...
Los clubes de golf, en razón de la magra cobertura boscosa que dejan o contienen, contribuyen a la erosión de los suelos – los cuales, muchas veces, son de buena calidad y, cómo se mencionó antes, podrían ser utilizados de forma productiva, eficiente y positiva por y para las comunidades. Estos clubes gastan enormes volúmenes de agua – ya que un solo golf se traga diariamente el equivalente del consumo hídrico de 6000 personas – por lo que crean una presión monstruosa sobre los acuíferos
4. Además, esta erosión viene acompañada de una utilización amplia, indiscriminada y altamente contaminante de grandes cantidades de pesticidas y de abonos sintéticos. Ahora bien, si en el Norte se trata, desde hace pocos años, de limitar aquellos daños de erosión y de contaminación (aunque nunca se lograrán eliminar, porque el diseño y la esencia de estos terrenos en sí lo impiden), el desastre ocasionado por estos proyectos en el llamado Sur es aún más considerable, por varias razones. Primero, porque las legislaciones ambientales que existen allí son, muchas veces, aún más irrespetadas por los capitalistas (locales o transnacionales) que en el ''Norte'' – ya que la impunidad y la injustica socio-ecológicas son planetarias, pero resultan ser más agudas en el ''Sur''. En segundo lugar, porque los terrenos de golf solamente son accesibles para las oligarquías locales y los turistas extranjeros adinerados. Consecuentemente, un club de golf en el Sur equivale a:
1) la destrucción, a veces brutal, de ecosistemas sensibles e irrecuperables. Por ejemplo, se cortan a menudo bosques tropicales para crear estos terrenos de golf, lo que contribuye al grave fenómeno de la desforestación y conlleva a una pérdida irremediable de la biodiversidad (entre ella, de especies endémicas), así como de fertilidad de los delicados suelos tropicales. Éstos, despojados de una cobertura vegetal adecuada, se erosionan y se vuelven a la larga estériles. Muchas veces localizados en la proximidad del mar, los terrenos de golf conllevan también, a menudo, a la destrucción de los vitales manglares, así cómo al blanqueamiento fatal de los arrecifes de coral (estos dos ecosistemas coexisten en simbiosis y son ambos amenazados por los cambios climáticos y la contaminación marina ya existente). De tal forma que estos arrecifes se mueren poco a poco, en razón de la percolación y del chorreo de aguas contaminadas con altas concentraciones de pesticidas sintéticos y de abonos nitrogenados, así como sedimentosas (por arrastre), hacia las costas (*). Sin embargo, los corales, una vez muertos, no se pueden resucitar como Jesús lo hizo con Lázaro, o tampoco cómo si fueran algún banco capitalista en quiebra. Y esto, a nivel puramente económico, resulta ser irracional y no-rentable, porque los arrecifes constituyen muchas veces, en estas regiones tropicales, una importante fuente de ingresos para el sector (eco)turístico que los aprovecha (snorkeling, buceo, etc.). Lo que me lleva al segundo efecto mayor...
2) degradación de la vida humana. Porque? Por algo muy sencillo que, sin embargo, muchísimos promotores inescrupolosos o algunos tecnócratas ignorantes (a veces interesados) se olvidan. Se trata del hecho que el mantenimiento y la salud de los ecosistemas están íntimamente ligados a la calidad y a las posibilidades de vida, así cómo a la salud humana. En este sentido, los clubes de golf aportan muy poco en lo inmediato, y a mediano y largo plazo, el balance es sumamente negativo. Contribuyen a la destrucción de ciertas actividades de subsistencia de las cuales los ricos y diversos ecosistemas amenazados por el golf representan el soporte, cómo la pesca artesanal, o el ecoturismo. Al sobre-explotar los acuíferos, se generan graves escaseces de agua para las poblaciones locales. Y repito: se tiene que considerar además que, en la gran mayoría de los casos, aquel crimen ecológico ni siquiera sirve para producir y/o garantizar (a corto plazo por lo menos) alimentos para una parte sustancial de las poblaciones locales, o para que tengan éstas un lugar digno donde vivir. Entonces, un factor poco considerado, aunque sumamente importante, es el daño socio-económico que los clubes de golf provocan. Además, muchas veces, éstos se ven acompañados de proyectos inmobiliarios (de bienes raices) multi-millionarios para semi-residentes occidentales ricos, muchos de ellos jubilados, que también contribuyen a la destrucción y contaminación del ambiente, de diferentes formas, entre otras:
I) por su consumo exagerado de recursos – ¡sobre todo de agua! – así cómo de productos ajenos o locales sobre-envueltos y el posterior desecho de estas envolturas innecesarias (o sea, basura tóxica), a menudo tiradas en vertederos a cielo abierto ya que no existien las insfraestructuras locales adecuadas para revalorizar estas materias; II) por la evacuación inadecuada de las aguas negras que generan estos asentamientos – muchas veces directamente en el mar, o sino a través de canalizaciones y plantas rudimentarias e ineficientes. Encima de ésto, donde se instalan estas ''comunidades exclusivas'', se crean o accentuan no solamente ciertos problemas ambientales, económicos, o de salud humana (y los costos de los mismos para la gente local y los sistemas públicos - si los hay), relacionados con el derroche y la contaminación que provocan, sino también tensiones sociales. Por que razón?
Simplemente por el hecho de instaurar un régimen de explotación económica de tipo neocolonial, en el cual las poblaciones locales ''sirven'' a algunos ''amos'' norteños afortunados, en empleos bastante mal pagados (es decir, después del 'boom' inicial de la construcción, quedan los trabajos de mantenimiento y de limpieza). De tal forma que los ''locales'' se van enfrascando, día a día, en una situación dentro de la cual sienten que no tienen control sobre su labor (dicen « no tengo otra »), tampoco sobre su vida o su destino. Además, su realidad les lanza a la cara, cotidianamente, la injusticia de su condición, que ellos terminan muchas veces equiparando con el hecho de no tener las mismas posibilidades económicas que sus ''amos'' disfrutan (lo que es normal aunque erróneo, ya que el estilo de vida de estos ''amos'' es absolutamente INDESEABLE para la humanidad por ser no-viable). Aquello engendra desesperaciones, frustraciones considerables, así cómo todos tipos de actitudes y comportamientos anti-éticos como el ''hacerse el vivo'' (oportunismo), el ''chanchullo'', la envidia, el individualismo, la prostitución del sexo y del carácter, el afán de poder y riquezas, la competencia excacerbada, etc. Muchos caen. En fin, se daña el tejído socio-comunitario, lo cual se ve empeorado si aquellas enclaves elitistas provocan la pérdida para algunos de su ''pan'', cómo suele ocurrir con el daño irreversible a la pesca artesanal (o al ecoturismo) en áreas costeras.
A nivel socio-cultural, resulta ser, entonces, de una violencia simbólica (Bourdieu) absoluta. La implantación de estos clubes de golf contribuye a nada menos que la aculturación de las poblaciones locales a favor de la cultura hegemónica del capitalismo occidental (Gramsci), es decir, que el sistema de valores proyectado allí conlleva al « consentimiento de los propios oprimidos » (Poulantzas). Pérdida del sentido, colonización de los imaginarios, transformación nefasta de la trama social. En ciertas regiones, territorios autóctonos enteros son sacrificados sobre el altar de este pasatiempo individualista, megalómano, tóxico y destructor, de gente indecendemente opulenta – en su mayoría ''caucasianos'' europeos y norte-americanos. El golf, a nivel cultural e ideológico, es, por ende, unos de los más fieles reflejos de la cultura eco y genocida del consumo y del derroche arrogantes del capitalismo dominante en el mundo; es la expresión por excelencia de la razón burguesa-capitalista de depredación parasitaria. En fin, la creación de clubes de golf en el Sur tiene también su costado directamente político, ya que muchas veces se implementan estos proyectos de ''desabilitación'' territorial por medio de una corrupción rampante y del soborno de las autoridades locales, por parte de poderosos y ricos inversionistas extranjeros aliados a una élite local anti-patriótica, escuálida y podrida hasta sus cogollo.
Como ilustración de los efectos del golf en el Sur, invito a los interesados a leer sobre la grave polémica entorno a un infame proyecto de construcción de un terreno con decenas de condominios para jubilados estados-unidenses adinerados en la provincia de Bocas del Toro, en Panamá, en plena zona de amortiguamiento del Parque Nacional Marino Bastimentos (articulado al actualmente amenazado Parque Internacional La Amistad, declarado Reserva de la Biósfera y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO). Panamá; un país del cual el territorio ha sido literalmente vendido, pedazo por pedazo, en los últimos 10 años, al capital extranjero... Detrás de este proyecto promovido por inversionistas norte-americanos, disfrazado de ''desarrollo sustentable'', se sospecha fuertemente que estaba la mano del BID (Banco Interamericano de Desarrollo), en el marco del no menos infame plan Puebla-Panamá
5.
En fin, ojalá que algún día hayan desaparecido estas abominaciones socio-ecológicas, económicas, políticas y culturales que son los clubes de golf. Mientras tanto, cabe preguntarnos, una vez más: ¿que herencia queremos dejar a nuestros hijos y nietos; grandes extensiones de tierra estériles y trofeitos de oro y plástico en forma de balita, o ecosistemas saludables así cómo sociedades mas sanas y justas?
P.D.: Una pequeña anécdota, sólo de paso... Hace algunos años, vivía en una región montañosa (de Quebec), y a veces en la madrugada, solía pasar frente a un grán club de golf que había por allí. La visión surrealista y espantosa a la vez que tenía en estos momentos era aquella de unos trabajadores vestidos de los pies hasta la cabeza con unos sacos blancos de estilo 'escafandra', que ''fumigaban'' con pesticidas sumamente tóxicos los greens (los cuales sólo deben su nombre al color verde que tienen, obtenido además de forma totalmente artificial). Desde luego, pensaba en estos pobres ''ricachones'', ingenuos, quienes, vestidos de sus jackets polos y pantalones quick-dry de 300$, iban, a penas dos horas después, a pisotear este mismo suelo envenenado, reirse y respirar hondo, recoger su pelotita del suelo una y otra vez, luego entre dos swings comerse un donut con las manos cubiertas (sin saberlo) de químicos... Era (y todavía es) profunda y tragicamente absurdo aquello. De hecho, con respecto a la salud, hay varias enfermedades por las cuales existen ya evidencias científicas convincentes que sean provocadas por el empleo de derivados del fluor (entre otras numerosas sustancias tóxicas) en los terrenos de golf
6.
Notas:
(*) No se puede subestimar la eco-toxicidad de los productos que se emplean en los terrenos de golf. La concentración de agentes activos en los productos sintéticos utilizados para su mantenimiento es sumamente elevada. Sobre estos terrenos se emplean a menudo fórmulas químicas especificamente diseñadas para MATAR A LAS LOMBRICES DE TIERRA
7. Como se sabe, sin embargo, las lombrices de tierra son una parte muy importante de LA VIDA del suelo, siendo ellas unos de los ''agentes bióticos'' más importantes de regeneración de la tierra. Ahora bien, para tener GREENS lindos y lisos, se las extermina. O sea, que para que los jugadores tengan un terreno esteticamente agradable, y a fines de evitar cualquier pequeño terrón inoportuno que resultaría perjudicial a las prestaciones de los golfeadores, se ASESINA LITERALMENTE AL SUELO, el cual, junto con el agua, constituye la base de la vida sobre esta Tierra.
Es más que tiempo, por ende, que la gente sepa lo que el golf es y ha causado a escala planetaria. Por ejemplo, la destrucción de los arrecifes de coral de los Cayos de Florida, de Hawai y de Jamaica ha sido muy accelerada por la construcción de numerosos clubes de golfs allí, con condominios y megas-hoteles adyacentes. ¿Porque? Ante todo, por haber destruido los manglares cercanos – estas selvas costeras marinas que son por así decir el ''pulmón'' de los arrecifes, en los cuales nacen y se reproducen la mayoría de las especies de peces que poblarán, una vez que sean adultos, los arrecifes (
http://hawaii-agriculture.com/hawaii-agriculture-blog/why-coral-reefs-face-a-catastrophic-future-guardian-co-uk/).
El propio gobierno de EEUU tuvo que reconocer el golf como una causante central del problema de la destrucción coralina:
"Lógica, Funcionamiento y Necesidad. Los arrecifes de coral necesitan, para su salud, un agua y un hábitat de buena calidad. La contaminación penetra el ecosistema de los arrecifes de varias formas, desde fuentes específicas de descargas tales como canalizaciones y alcantarillas de aguas negras (servidas), hasta chorreos más difusos de origen terrestre, producidos por (...) el desarrollo costero, la construcción de carreteras, o la irrigación [hídrica o química] de terrenos de golf. La contaminación del agua puede envenenar a varias especies sensibles, irrumpir en funciones ecológicas críticas, así cómo en las estructuras tróficas y sus dinámicas, de tal forma que impida el poblamiento y crecimiento normal de larvas coralinas, altamente necesarias." (
http://coralreef.gov/about/CRTFAxnPlan9.pdf)
Otro documento científico (Economic valuation of the coral reefs of Hawaii - Final report (2002); http://coralreef.gov/meeting18/evhcri_samoa_2007.pdf), se refiere reiteradamente a los daños ocasionados a los arrecifes de coral por parte de los clubes de golf:
« (...) chorreo proveniente de los terrenos de golf (...) » (p. ix)
« (...) exceso de nutrientes y chorreos costeros (...) utilización de pesticidas y fertilizantes sobre los terrenos de golf » (p. 7)
« (...) la percolación de fertilizantes provenientes de terrenos de golf destruye el frágil equilibrio que existe entre los corales, las algas y los herbívoros a raíz de la saturación [del agua] en nutrientes, la cual favorece algunas especies, habitualmente a costa de los arrecifes de coral, y conlleva a la alteración de la estructura del poblamiento coralino (p.e.: Marszalek, 1987; Grigg and Dollar, 1990; Maragos et al., 1985). » (p. 43).
« (...) acerca del problema del alga Kihei, entre sus causas se encuentra (...) la percolación desde terrenos de golf » (p. 65)
1 Acerca de este rechazo, basta con consultar la siguientes fuentes generales: http://www.panna.org/drift/fight; http://www.organicconsumers.org/corp/golf042604.cfm; http://www.pesticide.org/golfcourses.pdf. El siguiente artículo científico es también útil: http://en.cnki.com.cn/Article_en/CJFDTOTAL-CDXU200705019.htm
2 Rist, Gilbert. 2003. "Le développement : la violence symbolique d'une croyance ", in Christian Comeliau, ed., "Brouillons pour l'avenir, Contributions au débat sur les alternatives", Les Nouveaux Cahiers de l'IUED , Geneva, n° 14; PUF, Paris.
3 Por ejemplo, en el caso de Canadá: http://www.greenontario.org/strategy/golf.html
4 Marks, Corina (2007). « Too Much, Too Soon: Why your tourist dollars could end up destroying Baja California ». http://wildcoast.blog.com/tag/environmental-destruction/
5 http://www.redfrogbeach.com/our_team.html; http://salvemoslascostasdepanama.blogspot.com/2006_08_01_archive.html; http://www.diariocritico.com/panama/2008/Diciembre/noticias/115391/declaro-ilegal-la-construccion-de-un-proyecto-en-red-frog-beach.html; http://www.thepanamanews.com/pn/v_12/issue_16/community_01.html; http://www.planpuebla-panama.org/; http://burica.wordpress.com/2010/05/10/pila-patrimonio-de-la-humanidad-en-riesgo-por-represas/
6 http://www.healthandenvironment.org/tddb/contam/?itemid=2366
7 Vease el siguiente producto, por ejemplo: http://www.alibaba.com/product-gs/208655966/Earthworm_Killer_80_SP.html
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de la autora mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Si diffonde la coscienza antigolf nel mondo
L'UMORISTA GEORGE CARLIN
CONTRO IL GOLF
una riflessione a tutto campo

Pubblichiamo integralemente da
la traduzione italiana di questo interessante testo che tocca un pò tutti i temi del nostro movimento

DI MELANIE BELANGER
rebelion.org
«(...) la realtà sorge dallo spettacolo, e lo spettacolo è reale. Questa alienazione reciproca è l’essenza e il sostegno della società (...) lo spettacolo non è niente di meno che il senso della pratica totale di una formazione socio-economica, del suo impiego del tempo. (...) costituisce il modello presente della vita socialmente dominante. È l’affermazione onnipresente della scelta già fatta nella produzione e il suo consumo corollario(...) Nello spettacolo, immagine del’economia regnante, lo scopo non esiste, lo sviluppo è il tutto. »
(Guy Debord, La Sociedad del Espectáculo [la società dello spettacolo, ndt], 1967)
Ah, il golf... Se solo la gente sapesse un po’ meglio quello che è realmente! Forse è meglio iniziare mostrando quello che significa il golf proprio nel cuore dell’Impero, però da una prospettiva politica e uno sguardo profondamente critico, come quello che offre l’irriverente, militante anti-capitalista e anti-imperialista, umorista George Carlin a riguardo di questo argomento:
Carlin dimostra che la superficie ambientale e socialmente perduta negli USA a causa di questa attività che lui descrive come « elitista, di borghesi liberali egocentrici e arroganti, inutile, distruttrice e », corrisponde alla grandezza di 3 stati di questo paese ( due volte il Delaware e una volta Rhode Island, cioè , più di un milione di ettari). Menziona che in questo spazio e con le risorse che si investono futilmente in esso, si potrebbe mettere a posto tutta la gente che vive attualmente per le strade degli USA…In termini di letteratura generale, una brevissima incursione nel web ci permette constatare la ampiezza e la forza dei movimenti sociali che denunciano il golf, soprattutto per ragioni socio-ambientali (1) . Tuttavia, i promotori del golf, per non smettere di essere alla moda, dicono:« bene, d’accordo, però …è possibile fare golf club che siano “sostenibili”! » (soprattutto se loro stessi “pagano” gli studi dell’impatto ambientale, vero?...). Cero, questa è l’''onda'' adesso: si traveste di verde, si tranquillizzano le coscienze, e… si continua facendo la stessa cosa. Siamo in questa era nella quale il nome “ sviluppo sostenibile” si è trasformato in un nuovo cavallo di battaglia del capitalismo. E che cavallo! C’è di tutto, e tutto adesso è sostenibile (però, che si sta sostenendo o sostentando esattamente?). Non solo ci sono “golf sostenibili”, ma ci sono anche auto sostenibili. Si, senza ironie; i fabbricanti di auto e compagnie petrolifere transnazionali hanno adottato una strategia pubblicitaria di marketing « verde », feroce e molto seria. A prova, una famosa propaganda che dice« Faccia la sua parte per la Terrra; prenda la nuova XXX, eco-energetica, perché ogni gesto conta», e gli uccelli cantano, e gli alberi – al passare dell’auto “ecologica” – tremano con il vento, e la gente nell’annuncio si vede taaanto felice… Certo, hanno tutte le ragioni per esserlo: hanno comprato una macchina che non solo gli permette preservare il proprio stile di vita distruttore, senza nessun rimorso di coscienza di fronte l’allarmante tragedia mondiale del cambio climatico, ma nonostante tutto, stanno salvando il pianeta! Che bello, no?Si signore e signori: oggi, tutto è “sostenibile” o sostentabile. Non solo il golf, il petrolio e le auto, ma anche i microonde, le barbie, i peluche, e presto, all’improvviso usciranno alcune mutande sostenibili. Forse allora ci diranno, da quelle parti, che l’etichetta di questo vestiario intimo è biodegradabile, e molti applaudiranno e usciranno correndo a comprarsela una volta per tutte. Questa vetrina, o “lavaggio di faccia verde” (greenwashing) è una forza sempre più accecante e potente. Come non potrebbe essere così? È tanto lucrativo! E la gente si beve la favola: l’inganno è enorme. Non perché il consumo responsabile – al livello ecologico e sociale- non abbia nessuna validità. Certo che SI, è valido. Quello che si sta denunciando qua, senza dubbio, è un’altra cosa: è la logica perniciosa che permette al sistema capitalista di ri-condizionare la gente affinché rimanga in superficie, con una forma strumentale e meccanica, e che non rifletta e neanche si attivi, se non poco, riguardo alle cause profonde – sistemiche e strutturali – del problema. Quello risulterebbe radicale ( come era solito dire José Martì, ci sarebbe da “andare alla radice delle cose”), critico, fino a diventare pericolosamente rivoluzionario. Però ovviamente, cosa ci si può aspettare da una società “modellata” da più di un secolo e mezzo per la cultura egemonica del capitalismo e la credenza sacra nel “progresso” occidentale (2) ? Per questa ragione, credo che dobbiamo avere fede e vegliare affinchè questo nefasto fenomeno capitalista non metta radici in quei paesi della “Nostra America” che si iscrivono già, felicemente, dentro processi socialisti rivoluzionari, no? Torno ai campi di golf. Certamente esistono alcune strategie piuttosto che altre affinché i campi di golf siano un poco meno inquinanti e distruttivi al livello strettamente ecologico (3) . Senza dubbio, la lobby del golf nei paesi del Nord impiega grandi forze per “inverdire” la faccia di questo passatempo. Dico passatempo ( o hobby), perché come George Carlin, non credo che si possa classificare “sport” questa aberrazione di svago, nel quale alcune persone, per la maggioranza prepotenti, di classe sociale alta e molto alta o aspirando a far parte di quella, si pavoneggiano sopra della gramigna corta, aggiustata per bene e anormalmente perfetta, colpiscono una e un’altra volta ancora una pallina ridicola e la raggiungono con veicoli motorizzati, accompagnati dal loro “seguito e servitori” ( i caddies) che la raccolgono e gli lavano l’attrezzatura, per poi bere con loro una coppa in un lussuoso Club – privato, con membri esclusivi e caro, senza dubbio – dove approfittano del momento per fare “business”. Tanto superbo, come dice bene Carlin, è questo passatempo in termini di spazio necessario per la sua pratica! Questi immensi terreni ( che misurano centinaia di ettari ciascuno) rappresentano un’enorme perdita di terre potenzialmente coltivabili, o di boschi esistenti o potenziali, o semplicemente di spazi dove potrebbe abitare tanta gente. Quello non solo è incredibile, ma risulta essere anche profondamente indecente in questi tempi di severa crisi socio-ambientale e economica che viviamo in tutto il pianeta. Però non è tutto… I golf club, in ragione de la scarsa copertura boscosa che lasciano o contengono, contribuiscono a la erosione dei suoli – i quali, molte volte, sono di buona qualità e , come si è detto prima, potrebbero essere utilizzati in forma produttiva, efficiente e positiva per le comunità. Questi club spendono enormi volumi di acqua – già che un solo golf si inghiotte giornalmente l’equivalente del consumo idrico di 6000 persone – per questo creano una pressione mostruosa a carico degli acquedotti. (4) . Inoltre, questa erosione viene accompagnata da un utilizzo ampio, indiscriminato e altamente inquinante di grandi quantità di pesticidi e di concimi di sintesi. Bene, se nel Nord si tratta, da pochi anni, di limitare quei danni di erosione e contaminazione (anche se non si arriverà mai ad eliminarli, perché il disegno e la essenza di questi terreni di per se lo impediscono), il disastro provocato da questi progetti nel cosiddetto Sud è ancora di più considerevole, per varie ragioni. Primo, perché le legislazioni ambientali che esistono lì sono, molte volte, ancora di più inosservate dai capitalisti (locali o transnazionali) che al “Nord” – dato che l’impunità e l’ingiustizia socio-ecologica sono planetarie, però risultano essere più accentuate nel “Sud”. In secondo luogo, perché i terreni da golf sono solo accessibili alle oligarchie locali e ai turisti stranieri ricchi. Conseguentemente, un golf club nel sud equivale a: 1) la distruzione, a volte brutale, di ecosistemi sensibili e irrecuperabili. Per esempio, si tagliano spesso foreste tropicali per creare estesi terreni da golf, ciò contribuisce al grave fenomeno de la deforestazione e porta a una perdita irrimediabile della biodiversità (comprese le specie endemiche), così come della fertilità dei delicati suoli tropicali. Questi, spogliati di una copertura vegetale adeguata, si erodono e alla larga diventano sterili. Molte volte localizzati in prossimità del mare, i terreni da golf, comportano anche, spesso, la distruzione delle fondamentali mangrovie, così come dell’imbiancamento fatale delle barriere coralline ( questi ecosistemi coesistono in simbiosi e sono entrambi minacciati dai cambi climatici e l’inquinamento marino già esistente). In questo modo le barriere muoiono poco a poco, a causa della percolazione e dello scorrere di acqua contaminata con alte concentrazioni di pesticidi di sintesi e di concimi azotati, così come sedimenti ( per trascinamento) verso le coste (*). Senza dubbio, i coralli, una volta morti, non si possono resuscitare come Gesù fece con Lazzaro, e nemmeno come se fossero una qualche banca capitalista in crak. E questo, al livello puramente economico, risulta essere irrazionale e no-redditizio, perché le barriere costituiscono molte volte, in queste regioni tropicali, un’importante fonte di guadagno per il settore (eco)turistico che lo sfrutta (snorkeling, immersione, etc.).2) degradazione della vita umana. Perché? Per qualcosa di molto semplice che, senza dubbio, moltissimi promotori senza scrupoli o alcuni tecnocrati ignoranti ( a volte interessati) se dimenticano. Si tratta del fatto che il mantenimento e la salute degli ecosistemi sono intimamente legati alla qualità e la possibilità di vita, così come alla salute umana. In questo senso, i golf club apportano molto poco nell’immediato,e a medio e largo termine, il bilancio è sommamente negativo.Contribuiscono alla distruzione di alcune attività di sussistenza delle quali i ricchi e diversi ecosistemi minacciati dal golf rappresentano il supporto, come la pesca sportiva o l’ecoturismo. A causa dello sfruttamento delle falde acquifere, si generano gravi scarsità di acqua per le popolazioni locali. E ripeto: bisogna considerare inoltre che, nella grande maggioranza dei casi, quel crimine ecologico nemmeno serve per produrre e/o garantire (a breve termine per lo meno) alimenti per una parte sostanziale delle popolazioni locali, o affinché abbiano un luogo degno dove vivere. Allora, un fattore poco considerato, anche se sommamente importante, è il danno socio-economico che i golf club provocano. Inoltre, molte volte, questi vengono accompagnati da progetti immobiliari multimilionari per semi-residenti occidentali ricchi, molti dei quali pensionati, che contribuiscono alla distruzione e all’inquinamento dell’ambiente, in forme diverse, fra le quali:I) il consumo esagerato di risorse- soprattutto dell’acqua!- così come dei prodotti importati o locali più che impaccati e il successivo smaltimento di questi involucri in necessari ( o sia, spazzatura tossica), spesso gettati in discariche a cielo aperto già che non esistono le infrastrutture locali adeguate per rivalorizzare queste materie; II) per lo smaltimento inadeguato delle acque nere generate da questi insediamenti – molte volte direttamente nel mare, o altrimenti attraverso canalizzazioni e piante rudimentali e inefficienti. Sopra tutto questo, dove si installano queste“comunità esclusive” , si creano o accentuano non solo certi problemi ambientali, economici, o di salute umana ( e i costi degli stessi per la gente locale e i sistemi pubblici – se ce ne sono), relazionati con lo spreco e l’inquinamento che provocano, ma anche tensioni sociali. Per quale ragione ?v Semplicemente per il fatto di instaurare un regime di sfruttamento economico di tipo neocoloniale, nel quale le popolazioni locali “servono” alcuni “padroni” del nord fortunati, in lavori malpagati ( cioè, dopo il boom iniziale della costruzione, rimangono i lavori di mantenimento e di pulizia). In questo modo i “locali” rimangono intrappolati, giorno dopo giorno, in una situazione della quale sentono non aver controllo del proprio lavoro ( dicono “non ho alternativa”), nemmeno sopra la propria vita o il proprio destino. Inoltre, la loro realtà gli mette dinnanzi, quotidianamente, l’ingiustizia della loro condizione, che loro stessi finiscono per paragonare molte volte con il fatto di non avere le stesse possibilità economiche delle quali i loro “padroni” godono ( quello che è normale anche se è erroneo, già che lo stile di vita di tali “padroni” è assolutamente INDESIDERABILE per l’umanità già che irrealizzabile). Quello genera disperazione, frustrazione considerevole, così come tutti i tipi di attitudine e comportamenti anti-etici come “ hacerse el vivo” (opportunista, ndt), l’imbroglio, l’invidia, l’individualismo, la prostituzione del sesso e del carattere, l’affanno per il potere e la ricchezza, la competenza esasperata, etc. Molti cadono. Infine, si danneggia il tessuto socio-comunitario, il quale viene peggiorato quando quelle enclavi d’elite provocano la perdita per alcuni del proprio “pane”, come di solito accade con il danno irreversibile causato alla pesca artigianale ( o dell’ecoturismo) nelle aree costiere.A livello socio-culturale, risulta essere, allora, di una violenza simbolica (Bourdieu) assoluta. L’impianto di questi golf club contribuisce a niente meno che la acculturazione delle popolazioni locali a favore dell’egemonia del capitalismo occidentale (Gramsci), cioè, il sistema dei valori proiettato lì comporta l’ “assenso degli stessi oppressi” (Poulantzas). Perdita del senso, colonizzazione dell’immaginario, trasformazione nefasta della trama sociale. In certe regioni, territori autoctoni interi vengono sacrificati sopra l’altare de questo passatempo individualista, megalomane, tossico e distruttore, di gente indecentemente opulenta – per la maggioranza “caucasici” europei e nord-americani. Il golf, al livello culturale e ideologico, è , alla fine, uno dei più fedeli riflessi della cultura eco-genocida del consumo e dello spreco arrogante del capitalismo dominante nel mondo; è la espressione per eccellenza della ragione borghese-capitalista di depredazione parassitaria. Infine, la creazione di golf club nel Sud ha anche il proprio lato direttamente politico, dato che molte volte si implementano questi progetti di “disabilitazione” territoriale per mezzo di una corruzione lampante e del suborno delle autorità locali, da parte di potenti e ricchi imprenditori stranieri alleati a una elite locale anti- patriottica, squallida e marcia fino dal germoglio. A dimostrazione degli effetti del golf nel Sud, invito gli interessati a leggere sopra la grave polemica intorno a un infame progetto di costruzione di un terreno con decine di condomini per pensionati statunitensi ricchi nella provincia di Bocas del Toro, a Panama, in piena zona di ammortizzamento del Parco Nazionale Marino Bastimentos (articolato all’attualmente minacciato Parco Internazionale La Amistad, dichiarato Riserva della Biosfera e Patrimonio dell’Umanità dalla UNESCO). Panama; un paese il cui territorio è stato letteralmente venduto, pezzo a pezzo, negli ultimi 10 anni, al capitale straniero… Dietro questo progetto promosso da imprenditori nord-americani, travestito da “sviluppo sostenibile”, si sospetta fortemente ci fosse la mano del BID ( Banca Interamericana di Sviluppo), sotto il marchio non meno infame del piano Puebla-Panama (5) .Infine, magari un giorno sparisca questa abominazione socio-ecologica, economica, politica e culturale che sono i golf club. Intanto, è necessario domandarsi una volta in più: che eredità vogliamo lasciare ai nostri figli e nipoti; grandi estensioni di terra sterile e trofei d’oro e plastica a forma di pallina, o ecosistemi salubri così come società più sane e giuste ? PS: un piccolo aneddoto, solo un accenno… Alcuni anni fa, vivevo in una regione montuosa ( del Quebec), e a volte all’alba, ero solito passare davanti a un grande golf club che c’era lì. La visione surrealista e spaventosa allo stesso tempo che avevo in quei momenti era quella di un lavoratore vestito dai piedi alla testa con dei sacchi bianchi stile “scafandro”, che “fumigava” con pesticidi abbastanza tossici i greens ( i quali devono il loro nome solo al colore verde che hanno, ottenuto oltretutto in forma totalmente artificiale). Da allora, pensavo a questi poveri “ricconi”, ingenui, ch, vestiti dei loro jackets polo e pantaloni quick-dry da 300 dollari, andavano, solo due ore dopo, a calpestare quello stesso suolo avvelenato, a ridere e respirare a fondo, raccogliere la loro pallina dal suolo una e un’altra volta ancora, dopo due swings mangiarsi un donut con le mani coperte da pesticidi… Era ( e ancora è) profondo e tragicamente assurdo quello. Di fatto, in merito alla salute, ci sono varie malattie per le quali esistono già evidenza scientifiche convincenti che siano provocate dall’impiego di derivati dal fluoro ( fra le altre sostanze tossiche) nei terreni da golf (6) . Melanie Belanger
19.08.2010Traduzione per www.comedonchisciotte.org a cura di ANTONIETTA BANDELLONINote:(*) Non si può sottovalutare la eco-tossicità dei prodotti che si impiegano nei terreni da golf. La concentrazione di agenti attivi nei prodotti sintetici utilizzati per il loro mantenimento è sommamente elevata. Sopra questi terreni si impiegano spesso formule chimiche specificamente progettate per AMMAZZARE I LOMBRICHI DI TERRA
(7 . Com’è risaputo, i lombrichi di terra sono una parte molto importante per LA VITA del suolo, essendo uno degli “agenti biotici” più importanti di rigenerazione della terra. Adesso bene, per tenere GREEN belli e lisci , si sterminano. Cioè, affinché i giocatori abbiano un terreno esteticamente piacevole, e al fine di evitare qualunque piccolo mucchio di terra inopportuno che risulterebbe dannoso per le prestazioni dei golfisti, si ASSASSINA LETTERALEMENTE IL SUOLO, il quale, insieme al’acqua, costituisce la base della vita sopra questa Terra. È giunto il tempo, alla fine, che la gente sappia quello che è il golf e ciò che ha causato su scala mondiale. Per esempiol da distruzione delle barriere coralline de los Cayos de Florida, delle Hawai e della Jamaica è stata accelerata dalla costruzione di numerosi golf club lì, con condomini e mega-hotel adiacenti. Perché? Prima di tutto, per aver distrutto le mangrovie vicine-queste selve costiere marine sono il “polmone” delle barriere, nelle quali nascono e si riproducono la maggior parte delle specie di pesci che popoleranno, una volta adulte, le barriere (
). Lo stesso governo degli USA ha dovuto riconoscere il golf come una causa del problema della distruzione corallina:"Logica, Funzionamiento e Necessità. Le barriere coralline hanno bisogno, per la loro salute, di un’acqua e di un habitat in buona salute. L’inquinamento penetra nel ecosistema delle barriere in vari modi, dalla fonti specifiche delle discariche come la canalizzazione e deposito delle acque nere fino alla percolazione diffusa di origine terrestre, prodotta dallo (…) sviluppo costiero, la costruzione di strade, o l’irrigazione [idrica o chimica] di terreni da golf. La contaminazione dell’acqua può avvelenare varie specie sensibili, irrompere in funzioni ecologiche critiche, così come nelle strutture trofiche e le loro dinamiche in maniera tale da impedire il popolamento e l’accrescimento normale di larve coralline altamente necessarie.” (http://coralreef.gov/about/CRTFAxnPlan9.pdf
) Altro documento scientifico (Economic valuation of the coral reefs of Hawaii - Final report (2002); http://coralreef.gov/meeting18/evhcri_samoa_2007.pdf
) , si riferisce ripetutamente ai danni causati alle barriere coralline da parte dei golf club:« (...) percolazione proveniente dai terreni da golf (...) » (p. ix)« (...) eccesso di nutrienti e percolazione costiera (…) utilizzazione di pesticidi e fertilizzanti sopra i terreni da golf» (p. 7)« (...) la percolazione dei fertilizzanti provenienti dai terreni da golf distrugge il fragile ecosistema che esiste tra i coralli, le alghe e gli erbivori a capo della saturazione [dell’acqua] di nutrienti, la quale favorisce alcune specie, abitualmente vicino alle barriere coralline, e comporta le alterazioni della struttura dlla popolazione corallina(p.e.: Marszalek, 1987; Grigg and Dollar, 1990; Maragos et al., 1985). » (p. 43).« (...) riguardo al problema dell’alga Kihei, fra le causa si trova (...) la percolazione da terreni del golf » (p. 65)1 - Su questo argomento, si può consultare la seguente fonte generale: http://www.panna.org/drift/fight
. Il seguente articolo scientifico è utile:
- Rist, Gilbert. 2003. "Le développement : la violence symbolique d'une croyance ", in Christian Comeliau, ed., "Brouillons pour l'avenir, Contributions au débat sur les alternatives", Les Nouveaux Cahiers de l'IUED , Geneva, n° 14; PUF, Paris. 3 - Per esempio , nel caso del Canada: http://www.greenontario.org/strategy/golf.html4
- Marks, Corina (2007). « Too Much, Too Soon: Why your tourist dollars could end up destroying Baja California ». http://wildcoast.blog.com/tag/environmental-destruction/
-
Si veda il seguente prodotto, per esempio:

California
GOLFISTA MANDA IN FUMO 25 ACRI
intervengono 120 pompieri



Ovviamente non abbiamo bisogno di queste notizie per essere contrari alla realizzazione di nuovi campi da golf.Ma il fatto riguarda la tematica che seguiamo da vicino ovvero i campi da golf e l'ambiente e come sempre in questo settore, diamo tutte le notizie, anche questa.La fonte è assolutamente attendibile: Eurosport.

Un golfista con un tiro è diventato piromane e ha mandato in fumo 25 acri di terra.(Ricordiamo che 1 acro internazionale è uguale alle seguenti unità metriche: 4046,8564224 - 0,40468564224 ettari).Il fatto è avvenuto in California.A causare l'incendio è stato una pallina lanciata ovviamente con la mazza da golf, che dopo essere finita su una roccia ha scatenato una scintilla dalla quale son partite le fiamme, come si vede chiaramente nella foto sopra.